jueves, abril 30, 2015

Cómo encontrar y comprar tu perro o gato


Cómo encontrar y comprar  tu perro o gato


Adquirir una mascota es un gran paso en tu vida personal y familiar. Aunque pueda parecer que esta idea es algo exagerada no es así: el animalito que recibas en tu hogar dependerá de ti, necesitará cuidados y cariño, los mismos que él te proporcionará a ti. Como un miembro más de tu círculo íntimo debes considerarle desde el primer momento en que decidas que vas a tener un perrito, gato, conejo o cualquier otro animal.

Por lo tanto, aunque parece obvio decirlo, toma conciencia de que esta mascota significa responsabilidad y amor. Si no estás dispuesto a comprometerte  no sigas adelante. Si vas a regalárselo a tus niños, será genial para ellos, y para su desarrollo emocional y personal, les ayudará a relacionarse mejor y a ser responsables, pero conciencia a los pequeños de que desde el principio deben ser respetuosos con el animal y cumplir con las tareas que conlleva.

Una vez que lo tienes claro: hay que elegir el animal que vais a acoger. Si crees que es mucho para tus hijos, se sensato y cómprales un pez o una tortuga y espera a que estén preparados para un amigo más ‘grande’. No obstante, lo más común es decantarse por un gato o un perro, que son activos y amorosos.

 En cualquiera de estos dos casos tan populares, os pedimos que seáis exigentes con la procedencia de la mascotas.

Las tiendas físicas de animales no suelen ser el mejor sitio, ya que a veces los animales exhibidos no están en las mejores condiciones de cuidado y no es justo promover este trato a los animales. Por otro lado,  si no los tienen, que sería lo normal y lícito, no suelen tener contacto directo con los animales y la información que nos darán será de segunda mano, aunque en esta caso se suelen asegurar de que todos los animales que venden están cumpliendo todos las leyes.Estos establecimientos que no exhiben a sus animales se sirven de criadores profesionales, a los que puedes acceder de forma directa también.

¿ Qué significa adquirir una mascota de un criador? Supone que tu animal ha nacido en un entorno cuidado, en una casa con  zonas verdes para que sus animales estén ‘libres’ y  bien atendidos, siguiendo las normas establecidas. No se trata de un mero particular, sino de una persona que este se dedica a la cría y venta de animales. Para ello tiene licencias de apertura y venta de animales, además de formación específica. Sus instalaciones están reconocidas como ‘núcleo zoológico’, es decir, preparadas para tener estos animalitos felices y sanos.

Lo mejor de todo esto es que puedes comprobarlo con tu propios ojos. Una vez quete hayas decidido por una raza y un criador que estécerca o cuyas referencias te haya convencido,contáctalo y visítalo. El hecho de tramitar la compra a través de una tienda, hace que este paso sea más breve o complicado,  lo que vuelve a reafirmar las ventajas de buscar directamente tú al criador, ya que a ver a tu mascota antes de llevártela a casa es esencial, no solo para comprobar que está bien sino, sobre todo, porque es mejor enamorarse de la personalidad de un perrito o gatito que elegir una foto. Esto último, además, hará que elijas a una mascota que vaya mejor con tu caráctery no que sencillamente te parezca bonito.

Por si fuera poco, un criador te permite conocer a tu perrito/gatito mientras vive con su camada, te  mostrará todos los documentos acreditativos de la salud del perro o gato, te contará su historia, te presentará a sus padres, y sólo te dejará llevártelo cuando esté destetado (nunca antes) y si comprueba también él que tú eres una persona adecuada para cuidar de su cachorro, porque quienes trabajan en esto son auténticos amantes de los perros y gatos y especialmente de los suyos.

Un buen criador, además, te dará información sobre la raza de tu mascota, sus cuidados, su personalidad, alimentación y sobre sus problemas de salud a lo largo del tiempo. Te aconsejará y te acompañara en los primeros pasos con tu mascota. Nosotros te recomendamos que acudas directamente al criadero sin intermediarios, ya que en una tienda, no sólo impiden este proceso  anterior de conoceros (comprador, criador y cachorro), también es posible que te cobren de más por la transacción y sin que tú  hayas participado activamente en el proceso. Así que un criadero al ser más directo puede ser más barato y siempre más humano y fiable.


Entre estos puedes encontrar a su vez los que se dedican a perros de raza o pedigrí, los cuales deben presentar un certificado para evitar las estafas, y los que no se centran en ello o abiertamente te ofrecen perros mestizos. Para que te hagas una idea, un perro suele vale unos 300-400 euros de media, y si es de raza, suele costar entre 100 y 150 euros más. Si los precios andan muy por debajo, no te fíes mucho y comprueba que los papeles del animal estén en regla, ya que aunque parezca mentira, hay quien vende animales ilegales, exóticos e importados de otros países sin cumplir los requisitos de salubridad o comercio, o que revenden animales abandonados y maltratados. Esto hay que denunciarlo, no financiarlo. No confundas al criador, que te da a un perro sociable y sano con todas sus vacunas y papeles con un particular cualquier que vende un perro o un gato barato.


No obstante, los criadores de perros o gatos no salen de la nada: ¿cómo encontrarlos? La manera más sencilla es recurrir a medio especializados. Si decides optar por la compra de perros por internet  te recomendamos el buscador de criadores profesionales portaldelcriador.com.  Aquí puedes encontrar una camada que te interese y ponerte directamente en contacto con el criadero.


Cuando finalmente tomes a tu nuevo amigo del criadero y lo introduzcas en su nuevo hogar debes hacerle un chequeo en el veterinario y sobre todo mimarlo los primeros días en su nueva y extraña casa.  En esto insistimos, el criador te dará notas muy útiles, porque es el experto. No lo maleduques pero se especialmente cuidadoso, háblale suave y no le agobies. Ofrécele un sitio que sea sólo suyo y que no vayas a invadir y ponle un nombre corto con el que llamarle. Deja que el te conozca a ti y a los tuyos. Enséñale y edúcale sin ceder, pero sin ser duro e impaciente, ya que este es el principio de una gran amistad, disfrútala, no la fuerces.