Mucha gente cree que un perro es más feliz en el exterior. Al perro no le importa absolutamente nada el hecho de disponer de cientos de metros al aire libre si no hay absolutamente nadie. El perro ya sea rústico, deportivo, de raza, grande o pequeño, prefiere mucho más el estar en una salita pequeña, mal ubicado e incluso algo incómodo, pero teniendo cerca a su dueño.
El perro compañero de viaje de un camionero que lo lleva dentro del pequeño habitáculo que representa la cabina de su vehículo, está cien veces más contento que el perro guardían solitario en completa libertad de un parque repleto de árboles.
